Siguiendo con nuestra serie sobre la celebración de la primera comunión, llegamos hoy al tema de a quién invitar.
Desde nuestro punto de vista, creemos que la celebración de la primera comunión no debería convertirse en una pequeña boda, en la que superemos ampliamente los cien invitados.
El protagonista de la celebración debe de ser nuestro hijo o hija, en torno al cual debe de girar todo.
Por tanto, tendremos que centrarnos en la familia más directa, los abuelos, tíos y primos. Por supuesto, si no coincide con los de la primera comunión, no deben faltar la madrina y el padrino del bautismo, sean o no de la familia. A continuación, y siempre que sea posible porque no haya coincidencias con otras celebraciones, los amigos más directos, de la clase o compañeros de ocio del pequeño que, naturalmente irán acompañados por sus padres y hermanos, por lo que debemos ser cuidadosos y selectivos con este grupo.
Creemos que, solo en casos muy especiales, en los que exista una fuerte vinculación afectiva con el niño o niña, debemos invitar a amigos o compañeros de los padres, y lo mismo puede decirse de la familia más lejana.
Elabora siempre la lista de invitados en función de tu hijo, y no de los compromisos.
En esta cuestión es verdad que se pueden tener criterios diferentes a los nuestros, por lo que te invitamos a que dejes tu comentario abajo para decirnos tu opinión.
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